
Diana Forsanero, directora de enología de la Bodega Viña Cobos de Argentina estuvo en Lima para presentar su nueva línea Vinculum y la imagen renovada de sus Vineyard Designate.
Compartimos un agradable almuerzo en el restaurante LongHorn de San Isidro, el cual formó parte de las actividades de lanzamiento, así que tuvimos la oportunidad de interactuar, probar sus vinos y conocer de primera mano la trayectoria de Diana y la filosofía de la bodega.
Nos contó que ingresó a la bodega como pasante de la universidad en el año 2013 cuando tenía 23 años. Trabajó como operaria, luego pasó a ser asistente de enología y en el 2018 obtuvo el puesto de segunda enóloga encargada de todo el proceso técnico dentro de la bodega. Y en la actualidad, desde este 2022, 10 años después, está a cargo de la dirección enológica de bodega.

Hablando de los inicios de Viña Cobos, se remonta a la fundación que se dio con la cosecha 1999, sin tener bodega ni tener viñedos y a partir de la cual, Paul Hobbs se propuso posicionar el vino argentino en el mundo con una altísima calidad.
Recién vienen a tener bodega en el año 2006 y durante todo ese tiempo estuvieron elaborando vino en tanques alquilados de otras bodegas y tampoco tenían viñedo propio.
«Tuvimos viñedo propio recién en el 2013, entonces, para nosotros es un orgullo hacer grandes vinos trabajando con los 65 productores de Lujan de Cuyo y de Valle de Uco. Contamos con 4 ingenieros agrónomos que van a cada una de esas 65 fincas para hacer todos los trabajos que se requieran en los viñedos y que nosotros consideramos que es la mejor manera, desde el riego, de la poda, los brotes, el momento de la cosecha, esas cosas son muy importantes para nosotros así como capacitar al productor también»
Y lo han conseguido, porque aún siendo una bodega jóven cuentan con prestigio internacional en todas sus líneas, las cuales empieza con su varietal Felino que presenta 4 cepas, su Cocodrilo corte de regiones con más altitud, sus Bramare Apellation donde se separan los vinos elaborándolos únicamente por zonas y en Mendoza las mas importantes son Lujan de Cuyo y Valle de Uco. Luego Vínculum, que es el nuevo lanzamiento y viene a conmemorar la unión entre la bodega, los productores y el trabajo que se hace conjuntamente con ellos.
Luego viene la línea Viña Cobos que son sus Single Vineyard y finalmente sus vinos COBOS que son sus vinos ícono.

Nos cuenta también que trabajan de manera orgánica pero sin certificar. «tratamos de hacer el menor impacto posible pero si en el momento de la cosecha llueve mucho o hay granizo y las plantas se enferman, salimos a curar para poder garantizarle al productor cosechar la uva y nosotros tener la producción para poder hacer el vino»
Sobre la cantidad de vino que producen nos dijo que en la actualidad están elaborando unas 170,000 cajas que quiere decir aproximadamente 2 millones ciento cien mil botellas, de las cuales el 70 % se exporta a Estados Unidos en primer lugar, también a Brasil y Perú.
Sobre el lanzamiento, nos dice que han venido a mostrar el nuevo vino VÍNCULUM y el nuevo packagin de los Single Vineyard que cambian su etiqueta. Antes eran los que tenían la etiqueta crema que decían Bramare.
«El objetivo ha sido ordenar nuestro portafolio y facilitar la comunicación porque pasaba mucho que los clientes iban a comprar un Bramare Malbec y ahí empezábamos con las preguntas: ¿De Lujan de Cuyo?¿de Valle de uco?¿de Chañade? etc., era muy complicado, así que la ordenamos para que la información sea mas clara y poder trasmitirla con mas facilidad»

Al preguntarle como es interactuar con Paul Hobbs comentó: «es muy humilde, en el sentido que deja mucho que aportes, que des tu visión de los vinos, no es de venir a imponer, que bien podría ser, porque aparte de ser enólogo, es dueño de la bodega, pero no, es muy abierto a lo que vos quieras proponerle como mejora del vino siempre y cuando la calidad esté por encima de todo»
Sobre su aporte como enóloga mendocina nos dijo: «Aqui hay un tema que yo siempre remarco, nosotros lo que tratamos de trasmitir en el vino es una filosofía, no tanto del toque que le puede dar el enólogo, porque en toda la historia de Viña Cobos han pasado varios enólogos como Andres Vignoni y ahora me toca a mi, pero si ustedes ven la trayectoria de los vinos y comparan un Bramare del 2010, 2018 y uno de ahora, el vino sigue manteniendo su esencia. Entonces lo que buscamos es eso, que tengan el toque de Viña Cobos y no el del enólogo que esté atrás porque le tenemos que dar continuidad a la bodega, yo hoy puedo estar al frente de Viña Cobos pero en unos años tal vez no, mi aporte en la bodega es que los vinos sigan manteniénse como están hasta ahora, manteniendo esa concentración y manteniendo el legado que está generando Viña Cobos en el mundo»

Probamos los vinos con las carnes y bueno, solo confirmé porque están entre mis favoritos de los vinos del mundo porque son de una complejidad y elegancia que realmente deleitan. Fue un gusto conocer a Diana y apreciar su sencillez, amabilidad y conocimiento. Eso sí, la próxima vez será con comida peruana que dijo que no había tenido la oportunidad de probar. Gracias Diana y muchos éxitos. Ya te visitaré.
